Escritos de alumnos

jueves, 22 de noviembre de 2012

Camino al TP 3

Imágenes sensoriales

*Las imágenes sensoriales son las que captamos por medio de nuestros sentidos:
Visual:
           “dando vueltas,/girando,/entre muebles y sombras,”  Oliverio Girondo
Auditiva:
           “El viento de la noche gira en el cielo y canta.” Pablo Neruda
Táctil:
           “es herida, que duele y no se siente” Francisco de Quevedo
Gustativa:
          “dulce como mieles de jardines”
Olfativa:
          “olor acre de pólvora en sus manos”
También podemos percibir el movimiento por medo de imágenes cinéticas:
          “un andar solitario entre la gente” Francisco de Quevedo

Sinestesia

El origen del término “sinestesia” proviene de la fusión de dos palabras griegas que significan “junto” y “fusión” y se entiende como la percepción de una misma cosa a través de dos sentidos* diferentes; de alguna manera, implica una percepción más compleja.
Sinestesia es un procedimiento que consiste en una transposición de sensaciones, es decir, es la descripción de una experiencia sensorial en términos de otra.
Ejemplos:
“Que el alma que hablar puede con los ojos
también puede besar con la mirada.”
“Sobre la tierra amarga
caminos tiene el sueño. . .”
Imágenes en el rock nacional



Escuchemos “Mañana en el Abasto” 







Mañana en el Abasto  - letra: Luca Prodan / música: Sumo

Mañana de sol, bajo por el ascensor,
calle con árboles, chica pasa con temor.
No tengas miedo, no, me pelé por mi trabajo,
las lentes son para el sol y para la gente que me da asco.
No vayas a la escuela por que San Martín te espera,
estás todo el día sola y mirás mi campera.

Tomates podridos por las calles del Abasto,
podridos por el sol que quiebra las calles del Abasto.
Hombre sentado ahí, con su botella de Resero,
los bares tristes y vacíos ya, por la clausura del Abasto.

José Luis y su novia se besan por ahí en el Abasto,
yo paso y me saludan bajo la sombra del Abasto.

Parada Carlos Gardel, es la estación del Abasto,
Sergio trabaja en el bar en la estación del Abasto,
piensa siempre más y más, será por el aburrimiento.

Subte Línea B y yo me alejo más del cielo,
ahí escucho el tren, ahí escucho el tren,
estoy en el subsuelo, estoy en el subsuelo. 


Petinatto, un miembro de Sumo, hablando cuando compusieron esta cancn
(After Chabon)

Un climático pothead de los nuestros. También se repetía el esquema: una base salida de alguna parte con el contrabajo de Arnedo al frente, algunos saxofones pastoriles y una de las atmósferas mejor concebidas (aunque, como siempre, interviniera el azar jugando de nuestro lado). Luca puso la letra. No recuerdo si la tenía escrita o no. Es cierto que, como dicen muchos, tuvo que venir un italiano para rescatar “el Abasto como nadie lo había hecho antes”, pero también es verdad que por lo menos a Germán y a mí nos parecía horrible la interpretación de Prodan. Desafinada y muy difícil dentender en su momento. Hoy es fácil decir que es un clásico o un hit, pero no pasó lo mismo en su momento. La primera frase, “Mañaaaana aa de sollll...” sonaba espantosa. No supimos qué hacer con él y tampoco estaba en condiciones de realizar varias tomas ni mucho menos. Una vez más en un solo tono casi acuático el tema quedó terminado. Lo que quiero decir es que los tiempos de las composiciones hechas de antemano llegaban a su fin. Habíamos comenzado una nueva etapa: la de preparar bases para que Luca pusiera algo encima; y si había un grupo perfectamente preparado para crear bases... ¡ese era el nuestro! Pero aunque esto suene feliz, no lo era. Luca necesitaba ahora sí la ayuda de todos. Prodan dijo: “La letra es como una película... así... bajando por el ascensor, caminando por la calle, la mina que pasa... Era perfecto para un video. Yo todas las mañanas bajaba por el ascensor y me iba a visitar a una amiga, a la que siempre despertaba con flores. Era una amiga mía, estaba mal y yo la despertaba con las flores... Y nada... Era ese recorrido por el Abasto. José Luis y su novia existían de verdad”.
 






5°2° TP 3

   Consigna      ...

Escribir un texto lírico breve que contenga sinestesia. No tiene que ser extenso, pueden ser sólo dos o tres versos. El texto debe dar cuenta de tu paso por el colegio; un momento, un lugar, una impresión, un punto, un cruce en estos cinco años.

Recomendación: no dejen de ver la entrada "Camino al TP 3"  

Fecha de entrega: 
                                        Grupo A. 29/11/12

                                        Grupo B. 03/12/12

 Lectura: Ardiente paciencia de Antonio Skármeta;  
 podés encontrar la novela en la biblioteca de este blog.

 

jueves, 15 de noviembre de 2012

5ª2ª TP 2

*
*

5°2°, "Camino al TP3"


5°2°, "Camino al TP3"

                         acá van los poemas:


Llegó con tres heridas


Llegó con tres heridas:

la del amor,

la de la muerte,

la de la vida.


Con tres heridas viene:

la de la vida,

la del amor,

la de la muerte.


Con tres heridas yo:

la de la vida,

la de la muerte,

la del amor.


Miguel Hernández




Tristes guerras


Tristes guerras

si no es amor la empresa.

Tristes, tristes.


Tristes armas

si no son las palabras.

Tristes, tristes.


Tristes hombres

si no mueren de amores.

Tristes, tristes.


Miguel Hernández




3


sólo la sed

el silencio

ningún encuentro


cuídate de mí amor mío

cuídate de la silenciosa en el desierto

de la viajera con el vaso vacío

y de la sombra de su sombra.


Alejandra Pizarnik

Tu voz


Emboscado en mi escritura

cantas en mi poema.

Rehén de tu dulce voz

petrificada en mi memoria.

Pájaro asido a su fuga.

Aire tatuado por un ausente.

Reloj que late conmigo

para que nunca despierte.


Alejandra Pizarnik




Utopía



Ella está en el horizonte.

Me acerco dos pasos,

ella se aleja dos pasos.

Camino diez pasos

y el horizonte se corre

diez pasos más allá.

Por mucho que camine

nunca la alcanzaré.

Y entonces...

¿para qué sirve la utopía?

Para eso sirve:

para caminar.


Eduardo Galeano




Vórtice

Del mar, a la montaña,

por el aire,

en la tierra,

de una boca a otra boca,

dando vueltas,

girando,

entre muebles y sombras,

displicente,

gritando,

he perdido la vida,

no sé dónde,

ni cuándo.


Oliverio Girondo / Persuasión de los días


Te quiero


Tus manos son mi caricia,

mis acordes cotidianos;

te quiero porque tus manos

trabajan por la justicia.


Si te quiero es porque sos

mi amor, mi cómplice y todo,

y en la calle, codo a codo,

somos mucho más que dos.


Tus ojos son mi conjuro

contra la mala jornada;

te quiero por tu mirada

que mira y siembra futuro.


Tu boca que es tuya y mía

tu boca no se equivoca;

te quiero porque tu boca

sabe gritar rebeldía.


Si te quiero es porque sos

mi amor, mi cómplice y todo,

y en la calle, codo a codo,

somos mucho más que dos.


Y por tu rostro sincero,

y tu paso vagabundo

y tu llanto por el mundo,

porque sos pueblo te quiero.


Y porque amor no es aurora,

ni cándida moraleja,

y porque somos pareja

que sabe que no está sola.


Te quiero en mi paraíso

es decir que en mi país

la gente viva feliz

aunque no tenga permiso.


Si te quiero es porque sos

mi amor, mi cómplice y todo,

y en la calle, codo a codo,

somos muchos más que dos.


Mario Benedetti




Canto negro


¡Yambambó, yambambé!

Repica el congo solongo,

repica el negro bien negro;

congo solongo del songo

baila yambó sobre un pie.


Mamatomba,

serembe cuserembá.


El negro canta y se ajuma,

el negro se ajuma y canta,

el negro canta y se va.

Auememe serembó,

aé;

yambó,

aé.


Tamba, tamba, tamba, tamba,

tamba del negro que tumba;

tumba del negro, caramba,

caramba, que el negro tumba:

¡yamba, yambó, Yambambé!

Nicolás Guillén

 


5

La lluvia,

con frecuencia,

penetra por mis poros,

ablanda mis tendones,

traspasa mis arterias,

me impregna,

poco a poco,

los huesos,

la memoria.

Entonces,

me refugio

en un rincón cualquiera

y estirado en el suelo

escucho,

durante horas,

el ritmo de las gotas

que manan de mi carne,

como de una gotera.

Oliverio Girondo / Persuasión de los días


Si mis manos pudieran deshojar


Yo pronuncio tu nombre

en las noches oscuras,

cuando vienen los astros

a beber en la luna

y duermen los ramajes

de las frondas ocultas.

Y yo me siento hueco

de pasión y de música.

Loco reloj que canta

muertas horas antiguas.


Yo pronuncio tu nombre,

en esta noche oscura,

y tu nombre me suena

más lejano que nunca.

Más lejano que todas las estrellas

y más doliente que la mansa lluvia.


¿Te querré como entonces

alguna vez? ¿Qué culpa

tiene mi corazón?

Si la niebla se esfuma,

¿qué otra pasión me espera?

¿Será tranquila y pura?

¡Si mis dedos pudieran

deshojar la luna!


Federico García Lorca




Poema 3

Sólo la sed
el silencio
ningún encuentro

cuídate de mí amor mío
cuídate de la silenciosa en el desierto
de la viajera con el vaso vacío
y de la sombra de su sombra


Alejandra Pizarnik





¿Dónde?


¿Me extravié en la fiebre?

¿Detrás de las sonrisas?

¿Entre los alfileres?

¿En la duda?

¿En el rezo?

¿En medio de la herrumbre?

¿Asomado a la angustia,

al engaño,

a lo verde?...

No estaba junto al llanto,

junto a lo despiadado,

por encima del asco,

adherido a la ausencia,

mezclado a la ceniza,

al horror, al delirio.

No estaba con mi sombra,

no estaba con mis gestos,

más allá de las normas,

más allá del misterio,

en el fondo del sueño,

del eco,

del olvido.

No estaba.

¡Estoy seguro!

No estaba.

Me he perdido.


Oliverio Girondo / Persuasión de los días



11

ahora

en esta hora inocente
yo y la que fui nos sentamos
en el umbral de mi mirada


Alejandra Pizarnik / Árbol de Diana


Amantes

una flor
no lejos de la noche
mi cuerpo mudo
se abre
a la delicada urgencia del rocío


Alejandra Pizarnik

SELECCIÓN POEMAS

Poema 20


Puedo escribir los versos más tristes esta noche.

Escribir, por ejemplo: “La noche está estrellada,

y tiritan, azules, los astros, a lo lejos”.

El viento de la noche gira en el cielo y canta.


Puedo escribir los versos más tristes esta noche.

Yo la quise, y a veces ella también me quiso.


En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.

La besé tantas veces bajo el cielo infinito.


Ella me quiso, a veces yo también la quería.

Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.


Puedo escribir los versos más tristes esta noche.

Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.


Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.

Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.


Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.

La noche está estrellada y ella no está conmigo.


Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.

Mi alma no se contenta con haberla perdido.


Como para acercarla mi mirada la busca.

Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.


La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.

Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.


Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.

Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.


De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.

Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.


Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.

Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.


Porque en noches como esta la tuve entre mis brazos,

mi alma no se contenta con haberla perdido.


Aunque este sea el último dolor que ella me causa,

 y estos sean los últimos versos que yo le escribo.


Pablo Neruda

20 poemas de amor y una canción desesperada


Poema 20


dice que no sabe del miedo de la muerte del amor

dice que tiene miedo de la muerte del amor

dice que el amor es muerte es miedo

dice que la muerte es miedo es amor

dice que no sabe


Alejandra Pizarnik

Árbol de Diana




Oración


 

Habítame, penétrame.

Sea tu sangre una con mi sangre.

Tu boca entre a mi boca.

Tu corazón agrande el mío hasta estallar.

Desgárrame.

Caigas entera en mis entrañas.

Anden tus manos en mis manos.

Tus pies caminen en mis pies, tus pies.

Árdeme, árdeme.

Cólmeme tu dulzura.

Báñeme tu saliva el paladar.

Estés en mí como está la madera en el palito.

Que ya no puedo así, con esta sed

quemándome.

 

Con esta sed quemándome.

 

La soledad, sus cuervos, sus perros, sus pedazos.

 

Juan Gelman




Un hombre de éxito


No puede mirar la luna sin calcular la distancia.

No puede mirar un árbol sin calcular la leña.

No puede mirar un cuadro sin calcular el precio.

No puede mirar un menú sin calcular las calorías.

No puede mirar un hombre sin calcularla ventaja.

No puede mirar una mujer sin calcular el riesgo.


Eduardo Galeano
Las palabras andantes


Dicotomía incruenta


Siempre llega mi mano

más tarde que otra mano que se mezcla a la mía

y forman una mano.

Cuando voy a sentarme

advierto que mi cuerpo

se sienta en otro cuerpo que acaba de sentarse

adonde yo me siento.

Y en el preciso instante

de entrar en una casa,

descubro que ya estaba

antes de haber llegado.

Por eso es muy posible que no asista a mi entierro,

y que mientras me rieguen de lugares comunes,

ya me encuentre en la tumba,

vestido de esqueleto,

bostezando los tópicos y los llantos fingidos.


Oliverio Girondo

Persuasión de los días



 


El puro no



El no

El no inóvulo

El no nonato

El noo

El no poslodocosmos des pestios ceros noes que noan noan noan

y nooan

y plurimono noan al morbo amorfo noo

no démono

no deo

sin son sin sexo ni órbita

el yerto inóseo noo en unisolo amódulo

sin poros ya sin nódulo

ni yo ni fosa ni hoyo

el macro no no polvo

el no más nada todo

el puro no

sin no.


Oliverio Girondo

En la masmédula




La mezcla


No sólo

el fofo fondo

los ebrios lechos légamos telúricos entre fanales serios

y sus líquenes

no sólo el solicroo

las prefugas

lo impar ido

el ahonde

el tacto incauto solo

los acordes abismos de los órganos sacros del orgasmo

el gusto al riesgo en brote

al rito negro al alba con su esperezo lleno de gorriones

ni tampoco el regosto

los suspiritos sólo

ni el fortuito dial sino

o los autosondeos en pleno plexo trópico

ni las exellas menos ni el endédalo

sino la viva mezcla

la total mezcla plena

la pura impura mezcla que me merma los machimbres el almamasa tensa las tercas hembras tuercas

la mezcla


la mezcla con que adherí mis puentes


Oliverio Girondo

En la masmédula



Definiendo el amor


Es hielo abrasador, es fuego helado,
es herida, que duele y no se siente,
es un soñado bien, un mal presente,
es un breve descanso muy cansado.

Es un descuido, que nos da cuidado,
un cobarde, con nombre de valiente,
un andar solitario entre la gente,
un amar solamente ser amado.

Es una libertad encarcelada,
que dura hasta el postrero paroxismo,
enfermedad que crece si es curada.

Este es el niño Amor, este es tu abismo:
mirad cuál amistad tendrá con nada,
el que en todo es contrario de sí mismo.


Francisco de Quevedo


Mi lumía


MI lu

mi lubidulia

mi golocidalove

mi lu tan luz tan tu que me enlucielabisma

y descentratelura

y venusafrodea

y me nirvana el suyo la crucis los desalmes

con sus melimeleos

sus eropsiquisedas sus decúbitos lianas y dermiferios limbos y

gormullos

mi lu

mi luar

mi mito

demonoave dea rosa

mi pez hada

mi luvisita nimia

mi lubísnea

mi lu más lar

más lampo

mi pulpa lu de vértigo de galaxias de semen de misterio

mi lubella lusola

mi total lu plevida

mi toda lu

lumía


Oliverio Girondo

En la masmédula




Rima XXX

Asomaba a sus ojos una lágrima
y a mi labio una frase de perdón;
habló el orgullo y se enjugó su llanto,
y la frase en mis labios expiró.

Yo voy por un camino; ella, por otro;
pero, al pensar en nuestro mutuo amor,
yo digo aún: —¿Por qué callé aquel día?
Y ella dirá: —¿Por qué no lloré yo?


Gustavo A. Bécquer

Rimas






Yolleo


Eh vos

tatacombo

soy yo

di

no me oyes

tataconco

soy yo sin vos

sin voz

aquí yollando

con mi yo sólo solo que yolla y yolla y yolla

entre mis subyollitos tan nimios micropsíquicos

lo sé

lo sé             y tanto

desde el yo mero mínimo al verme yo harto en todo

junto a mis ya muertos y revivos yoes siempre siempre

yollando y yoyollando siempre

por qué

si sos

por qué di

eh vos

no me oyes

tatatodo

por qué tanto yollar

responde

y hasta cuándo


Oliverio Girondo

En la masmédula





¿Qué diría?


¿Qué diría la gente, recortada y vacía
si en un día fortuito, por ultra fantasía,
me tiñera el cabello de plateado y violeta,
usara peplo griego, cambiara la peineta
por cintillo de flores: miosotis o jazmines,
cantara por las calles al compás de violines,
o dijera mis versos recorriendo las plazas,
libertado mi gusto de vulgares mordazas?


¿Irían a mirarme cubriendo las aceras?
¿Me quemarían como quemaron hechiceras?
¿Campanas tocarían para llamar a misa?


En verdad que pensarlo me da un poco de risa.

Alfonsina Storni

El dulce daño (1918)


Oración de un desocupado


Padre,
  desde los cielos bájate, he olvidado
las oraciones que me enseñó la abuela,
pobrecita, ella reposa ahora,
no tiene que lavar, limpiar, no tiene
que preocuparse andando el día por la ropa,
no tiene que velar la noche, pena y pena,
rezar, pedirte cosas, rezongarte dulcemente.

Desde los cielos bájate, si estás, bájate entonces,
que me muero de hambre en esta esquina,
que no sé de qué sirve haber nacido,
que me miro las manos rechazadas,
que no hay trabajo, no hay,
  bájate un poco, contempla
esto que soy, este zapato roto,
esta angustia, este estómago vacío,
esta ciudad sin pan para mis dientes, la fiebre
cavándome la carne,
este dormir así,
bajo la lluvia, castigado por el frío, perseguido
te digo que no entiendo, Padre, bájate,
tócame el alma, mírame
el corazón,
yo no robé, no asesiné, fui niño
y en cambio me golpean y golpean,
te digo que no entiendo, Padre, bájate,
si estás, que busco
resignación en mí y no tengo y voy
a agarrarme la rabia y a afilarla
para pegar y voy
a gritar a sangre en cuello
por que no puedo más, tengo riñones
y soy un hombre,
bájate, qué han hecho
de tu criatura, Padre?
un animal furioso
que mastica la piedra de la calle?


Juan Gelman

Violín y otras cuestiones



Poema 12

Se miran, se presienten, se desean,

se acarician, se besan, se desnudan,

se respiran, se acuestan, se olfatean,

se penetran, se chupan, se demudan,

se adormecen, despiertan, se iluminan,

se codician, se palpan, se fascinan,

se mastican, se gustan, se babean,

se confunden, se acoplan, se disgregan,

se aletargan, fallecen, se reintegran,

se distienden, se enarcan, se menean,

se retuercen, se estiran, se caldean,

se estrangulan, se aprietan, se estremecen,

se tantean, se juntan, desfallecen,

se repelen, se enervan, se apetecen,

se acometen, se enlazan, se entrechocan,

se agazapan, se apresan, se dislocan,

se perforan, se incrustan, se acribillan,

se remachan, se injertan, se atornillan,

se desmayan, reviven, resplandecen,

se contemplan, se inflaman, se enloquecen,

se derriten, se sueldan, se calcinan,

se desgarran, se muerden, se asesinan,

resucitan, se buscan, se refriegan,

se rehúyen, se evaden y se entregan.


Oliverio Girondo

Espantapájaros



II

Sin ti

el sol cae como un muerto abandonado.


Sin ti

me tomo en mis brazos

y me llevo a la vida

a mendigar fervor.


Alejandra Pizarnik

Las aventuras perdidas



Soneto


Desmayarse, atreverse, estar furioso,

áspero, tierno, liberal, esquivo,

alentado, mortal, difunto, vivo,

leal, traidor, cobarde, animoso;


no hallar fuera del bien, centro y reposo,

mostrarse alegre, triste, humilde, altivo,

enojado, valiente, fugitivo,

satisfecho, ofendido, receloso;


huir el rostro al claro desengaño,

beber veneno por licor suave,

olvidar el provecho, amar el daño;


creer que un cielo en un infierno cabe,

dar la vida y el  alma a un desengaño:

esto es amor, quien lo probó lo sabe.


Félix Lope de Vega